El albergue se asienta sobre una isla orgánica pero artificial que se hace mediante el uso de cañas tejidas en el cuerpo de la isla para mantenerla. Se han hecho grandes esfuerzos para mantener vivos los métodos tradicionales de construcción y esto incluye la construcción de las casas de caña.

Todas las habitaciones están hechas casi en su totalidad de caña y madera y los edificios de las islas flotantes están construidos con herramientas y métodos tradicionales para proteger el medio ambiente y las personas que viven en la isla flotante de los Uros.

Con poca luz o contaminación del aire, durante la noche las estrellas brillan y los atardeceres y amaneceres son fascinantes. Es el tipo de destino que inspira novelas para escribir, pinturas para pintar y las prioridades de la vida para encajar.